Santiago de Cali, enero 23 de 2024.- El güireo y chacaleo, que surgió como un juego de niños en algunas comunas del oriente, se convirtió en una amenaza para los menores, que hoy se dedican a jugar a la violencia, sostuvo la Concejal, Daniella Plaza Saldarriaga, tras afirmar, “que el oriente está en peligro”.

La afirmación la hizo la Cabildante, en la sesión plenaria citada para analizar dicha problemática con la participación del gobierno distrital, entre ellos, Seguridad y Justicia, Deporte y Recreación, Bienestar Social, Educación, el Consejo Municipal de Juventud y la Policía Metropolitana de Cali, en cabeza de su comandante.

Plaza Saldarriaga, aseveró que la deserción escolar, es un factor que viene en aumento en la zona oriente que para el año 2022, registró 1886 casos de deserción y para el año 2023, 2.332, en su mayoría niños, niñas y adolescentes de las comunas 14, 15 y 21. “Al no hacer parte del sistema escolar dejan de percibir beneficios y encuentran en la práctica de güireo y chacaleo una forma de ocupar el tiempo libre”, indicó la Concejal.

“Esto empezó como un juego de baile y cultura, pero luego del estallido social, se convirtió en un juego violento donde usan piedras y otras armas, como cuchillos y machetes, incluso armas de fuego, generando en una ola de inseguridad, que pone en peligro de quienes participan y del entorno social”, aseveró Daniella Plaza Saldarriaga.

La Cabildante solicitó a la actual Administración, atender a esta población y prevenir esta situación con oferta institucional que debe superar la represión. “Desde los organismos de la Administración en sinergia con el sector privado se podrían adoptar medidas en el Plan de Desarrollo, como la política de integración social económica, para jóvenes en alto riesgo del oriente de Cali, a través de los territorios de inclusión y oportunidades”, manifestó Plaza Saldarriaga.

Entre tanto, el Comandante de la Policía Metropolitana de Cali, Coronel, Carlos Oviedo Lamprea, anunció que tiene ya un diseño de seguridad que prioriza tres factores, entre ellos, la violencia por homicidios y lesiones personales, el hurto y un tercero los jóvenes en riesgo, que instrumentaliza a niños, niñas y adolescentes. “Ya hemos tenido reuniones sobre este último punto, pero debe tener un trato integral para reorientar a estos jóvenes, llamando en primer lugar la atención de padres de familia, que son los directos responsables de sus hijos”.

“Hemos caracterizado sectores en las Comunas 7, 15 y Comuna 21, donde se detectan este tipo de movimientos donde participan  menores entre 8 a 16 años. Las causas de estos movimientos y encuentros, son: la deserción escolar, la falta de adultos responsables, que corresponde al papel de padres de familia, las fronteras invisibles, las retaliaciones o venganza y la violencia intrafamiliar, estos dos últimos que llevan a agresión, lesiones personales y homicidios”, aseveró el Coronel Gómez Lamprea.

El Presidente del Concejo, Carlos Andrés Arias Rueda, aseveró que urge una mesa de trabajo entre los organismos citados al Concejo para tratar este fenómeno de manera integral de cara a la construcción de un indicador claro en el Plan de Desarrollo, además solicitar la intervención del gobierno nacional, para evitar la instrumentalización y reclutamiento de menores a través del chacaleo, que es la forma como inducen a los menores a la criminalidad. Arias Rueda también planteó la creación de una Comisión Accidental del Concejo para hacer seguimiento a esta problemática social expuesta en plenaria. 

Yeison Arboleda, consejero de juventud y habitante del oriente de Cali, en representación de la comunidad afro, explicó que “el güiro y chacaleo, amenaza el futuro de la juventud. Esto ha ganado relevancia desde 2022, con fiestas clandestinas y actividad ilícitas, que desafían la seguridad y la paz de las comunas de oriente”.

“Esto va más allá de realidades simples que involucra a menores entre los 8, hasta los 28 años, aumentando la violencia especialmente en la tasa de homicidios para el año 2022, en su mayoría registrados en zona oriente de Cali”, expresó Arboleda.

La violencia la genera el güireo, mientras que el chacaleo, que es una fiesta callejera con dj, sirve para la venta de fármacos de todo tipo y hasta licor adulterado.

John Edward Montaño Cortés, también consejero de juventud de Cali, manifestó que la ruta de acción para mitigar esas actividades, debe convocar a entidades a la mesa interinstitucional por la vida y los jóvenes del oriente de Cali, donde tomen asiento la Policía, la Administración Distrital, el ICBF, Plataformas de Juventud y Defensores de Derechos Humanos, entre otros.

Asimismo, dijo Montaño, la reconstrucción del tejido social de valor, para que se puedan eliminar las barreras invisibles y que la cultura siga siendo el lazo comunicante para vivir en paz. “Aumentar la oferta de educación y empleo, pero enfocado a potencializar destrezas y habilidades, para descartar la actividad del microtráfico”, agregó.

Laura Andrea Agredo, también consejera de juventud, recordó que Cali tiene una agenda de juventud que debe materializarse en el Plan de Desarrollo, “para que los jóvenes tengan dolientes, en temas de construcción de paz y derecho a la ciudad, una ruta que deben seguir, porque el tema debe ser articulado con varios organismos del gobierno distrital”.

Jairo García Guerrero, secretario de Seguridad y Justicia, dijo a su turno, que le preocupa el potencial componente criminal que tiene el güireo y chacaleo, que viola derechos de los niños, niñas y adolescentes de Cali. Pero pidió no acelerarse a estigmatizar el tema.

El Concejal Carlos Hernando Pinilla Malo, indicó que todo dependerá del Plan de Desarrollo que proyecte el gobierno distrital, donde están las políticas públicas y metas. “Si tenemos objetivos puntuales y medibles, podremos ser eficientes en el manejo de los recursos públicos”, dijo el Cabildante, quien destacó que este es un tema clave.

Para la Concejal Alexandra Hernández Cedeño, la pandemia y el estallido social, dejó en Cali grandes evidencias de problemáticas que se liberan en estos encuentros denominados güireo y chacaleo. “Hoy nuestros niños, niñas y adolescentes tienen rabia y la forma de liberar esa rabia es en esos encuentros. Por eso debemos propender por ser padres responsables y volver a la escuela de padres”, indicó la cabildante, quien pidió la intervención de secretarías claves como educación, deporte, cultura para liberar esa rabia y de paso impedir que la droga y las armas sigan siendo la salida a los jóvenes. “Pero todo con calidad y oportunidad”, puntualizó.  

La Concejal Ana Leidy Erazo Ruiz, precisó que el oriente tiene varios factores que generan violencia dado que hay varias necesidades básicas insatisfechas, sumado a ello la presencia de bandas organizadas que instrumentalizan a los niños, niñas y adolescentes, en temas de agresión y microtráfico.

El Primer Vicepresidente del Concejo, Marlon Andrés Cubillos Borrero, solicitó a las instituciones participantes del debate, hacer visibles las estrategias en los territorios para que las inversiones tengan enfoque y lleguen  a la población que lo necesita. “Invertir en educación, pero en estrategia de pedagogía y cultura, promoviendo la articulación y en conjunto, para que el impacto sea mayor”.

El Concejal Sergio Mauricio Zamora Betancur, precisó que se debe prevenir el riesgo con una política social fuerte, para mitigar este fenómeno cultural. “Hablamos de deserción escolar, pero hay otras, como la falta de desarrollo en infraestructura en los territorios como sucede en el oriente, además de la falta de oportunidades. Lo principal es la escucha a los jóvenes, como lo pide el Consejo de Juventud”.

La Concejal Audry María Toro Echavarría, consideró que la idea es no permitir que güireo y chacaleo se conviertan en expresiones culturales, que no representan a los jóvenes. Por eso solicitó a la Policía la adopción de medidas, acompañadas de acciones de Estado, en políticas públicas como el Plan de Desarrollo.

Rodrigo Salazar manifiesta que es debate que se le debe dar tratamiento de tipo político y social, “La autoridad significa legitimidad, y lo que se pretende con este gobierno que inicia es que haya un estado legítimo, en la cual intervenga en la causa de los problemas sin incurrir a la fuerza y violaciones a los derechos humanos, respetando la dignidad”

El Concejal Edison Lucumi Lucumi, indicó que esta administración no puede ser indiferente a lo que sucede con el güireo y chacaleo. Pero recordó que acorde a los indicadores que traen los organismos de Seguridad y Justicia, Educación y Bienestar Social, se requiere revisar esas estadísticas, especialmente en lo relacionado con hechos de violencia como homicidios y violencia intrafamiliar donde los afectados son niños, niñas y adolescentes. Igualmente dijo el Concejal, que la deserción sigue siendo un factor que predomina en las aulas escolares públicas de Cali.

Comunicado Estratégico: 21.2.3.33/2024

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